A las puertas del lanzamiento del
Nokia Lumia 800, uno
móviles de los que se postulan como buque insignia de
Windows Phone 7.5 Mango, habrá quien se plantee hacerse con este dispositivo en contraposición a otro con un sistema más popular.
Android, por ejemplo. En este sentido, podría ser interesante enfrentarlo a uno de los terminales más populares del segmento, el
HTC Sensation, que muchos consideran como uno de los más potentes de su ramo (con permiso del
Samsung Galaxy S2),
y de sus posteriores revisiones (con novedades en el plano del audio y
mayor velocidad de proceso). Veamos donde destaca cada uno de estos
terminales de referencia.
Diseño y pantalla
¿Prefieres los móviles basados en líneas estilizadas y muy
estéticas o prefieres los terminales robustos con una contundente
presencia? Esta es principalmente la diferencia entre ambos. Mientras el
Nokia Lumia 800 apuesta por un
chasis monobloque de suave ya atractivo policarbonato, el
HTC Sensation opta por una carcasa metálica, que le impime un peso y una sensación de resistencia que salta a la vista.
En cuanto a la
pantalla, el
Nokia Lumia 800 lleva un panel AMOLED de 3,7 pulgadas, con una
resolución de 800 x 480 píxeles, mientras que el
HTC Sensation opta por uno de tipo Super LCD, mucho más amplio, de 4,3 pulgadas, dotado de un lienzo de 960 x 540 píxeles. El tamaño de pantalla es uno de esos puntos sujetos a gustos por parte del usuario. Quienes busquen un teléfono con alma de
tablet, quizás el
HTC Sensation se ajuste más a sus intereses, mientras que aquellos que prefieran un terminal más cómodo y manejable, optarían por el
Nokia Lumia 800.
Conectividad
Ambos terminales presentan un perfil de conexiones muy similar. Ambos pueden navegar por Internet en
redes móviles 3G a una velocidad de descarga máxima de 14,4 Mbps, además de reconocer redes
Wi-Fi en sus versiones
802.11b/g/n. Del mismo modo, ambos ofrecen soporte para redes multimedia basadas en
Wi-Fi (lo que se conoce como
DLNA), además de presentar puertos
microUSB y
Bluetooth.
La principal diferencia en este sentido estribaría precisamente en ese conector
microUSB. En el caso del
HTC Sensation, empleando un adaptador
MHL, podríamos usarlo como
salida de alta definición, permitiéndonos conectar el móvil a un televisor o monitor compatible mediante
HDMI. Ambos, sin embargo, ofrecen la posibilidad de compartir la conexión móvil del terminal con otro dispositivo mediante función
tethering (convirtiendo el
móvil en un módem inalámbrico).
Multimedia
Aquí las diferencias se hacen más notables. Por un lado, la compatibilidad de formatos en el
HTC Sensation es un tanto más amplia, al tratarse de un
móvil basado en Android. El
Nokia Lumia 800 está
más restringido en este apartado, aunque lo compensa con un par de
servicios nativos que lo distinguen del resto de ecosistemas en general
y, de hecho, de
otros móviles con Windows Phone 7.5 Mango en particular. Hablamos de los servicios
Nokia Music y Nokia Mix.
Con estos sistemas, tenemos a nuestro alcance un catálogo de
más de catorce millones de canciones de forma gratuita, que además no es necesario descargar en la memoria del teléfono, ya que suenan en modalidad online, o
streaming. En el
HTC Sensation, lo más parecido es
HTC Watch,
un servicio similar, aunque dedicado a piezas audiovisuales. No
obstante, en este caso hay que pasar por caja para acceder al catálogo.
Pese a todo, siempre nos quedaría la posibilidad de usar
Spotify, aunque de nuevo, tocaría usar la tarjeta de crédito (y por cierto, l
a
aplicación de Spotify para Windows Phone 7.5 Mango puede llegar a verse
como más completa, atractiva y social que la que descargaríamos desde
la Android Market).
Otro punto esencial para entender cómo pueden distanciarse en el apartado
multimedia los
Nokia Lumia 800 y HTC Sensation es en la vocación de ambos como plataforma para
videojuegos. El
móvil de
HTC tiene a su alcance las
miles de aplicaciones descargables
desde su escaparate online, con propuestas para todos los gustos y
exigencias. No obstante, carece de una plataforma que realmente integre a
una comunidad de jugadores, que es precisamente lo que suple el
Nokia Lumia 800 gracias a la necesacia presencia de
Xbox Live en Windows Phone 7.5 Mango.
Desde
Xbox Live no sólo podemos ver el
catálogo de juegos disponibles para descargar en el Nokia Lumia 800, sino que además podemos gestionar nuestra cuenta en la
comunidad online de Microsoft, vinculada con su
consola de sobremesa, la
Xbox 360. Lógicamente, esto resultará más atractivo de cara a quienes ya cuenten con esa plataforma; aquellos que usen
PS3 o directamente no estén interesados en
videojuegos, no verán un aliciente en este punto.
Potencia y memoria
Momento de polémica.
¿Es más importante la integración
software-hardware o la presencia de una configuración que apueste por
dotar a un terminal de los componentes más potentes y veloces? En este sentido, los
Nokia apelan directamente a esa
primera categoría, donde
no es preciso contar con un perfil de altísimo rendimiento al estilo de la generación dual-core: un
procesador mononúcleo de 1,4 MHz y una memoria RAM de 512 GB bastan para que
Windows Phone 7.5 Mango vaya como la seda, sin ralentizaciones y mostrando atractivas animaciones en cada transición.
Por su parte, el
HTC Sensation opta por esteroides de silicio. Lo suyo es una
sobrada velocidad, de 1,2 GHz, impulsada por un procesador de doble núcleo, que se apoya a su vez en una
memoria RAM de 768 MB.
No obstante, en la práctica este visible escalón técnico no tiene su
traducción en una diferencia constatable en el rendimiento de uno y otro
terminal. Realmente, ambos dispositivos trabajan con una alta fluidez.
Respecto a la capacidad de ambos para almacenar datos, el
Nokia Lumia 800 tiene una memoria interna de 16 GB, mientras que el
HTC Sensation se limita a un GB. No obstante, esta diferencia se compensa con la opción que
ofrece el móvil con Android de instalar una tarjeta microSD de ampliación de memoria con hasta 32 GB adicionales, cosa que luce por su ausencia en el dispositivo de
Nokia.
Sistema y aplicaciones
La principal diferencia entre ambos teléfonos está en su plataforma de uso. Ya te hemos dicho que el
Nokia Lumia 800 se convierte en la apuesta fuerte de Microsoft con su Windows Phone 7.5 Mango. Hablamos de un entorno con un aspecto muy original y atractivos, especialmente enfocado a la
integración de redes sociales y servicios nativos de la firma de
Redmond (como
Windows Live, Office o Xbox Live, entre otros), así como profundamente centrado en
funciones dependientes de la nube.
Es un sistema que te gustará si eres de los que cada vez que se hace con un
iPhone o un
Android se pregunta
“¿qué puedo usar para abrir documentos de Word u hojas de Excel?”, así como aquellos que aún no hayan dado al salto a
Gmail y sigan fieles a su correo de
Hotmail. Pese a todo, el fondo de
aplicaciones descargables de las que goza en su Marketplace es de 40.000 aplicaciones, frente a las
350.000 de la Android Market, aunque en esencia tiene prácticamente todas las utilidades más populares de la generación
smartphone.
Del otro lado,
el HTC Sensation funciona, actualmente, con Android 2.3, también conocido como
Gingerbread, aunque se espera que se actualice a
Android 4.0 Ice Cream Sandwich (en una fecha que está por determinar). Ofrece la capa de
iconos y ventanas flotantes de la casa, HTC Sense, un
sistema giratorio de pantallas personalizables muy aplaudido dentro del ecosistema Android. El arma más poderosa de esta plataforma es la forma en que
se integra con los muchos servicios de Google: Gmail, Google Maps, Gtalk, Google+, etc.
No obstante, cada terminal apuesta también por algunas aplicaciones
exclusivas que ayudan a diferenciarse entre sí, además de distinguirse
de otros móviles de su mismo ecosistema. En el caso del
HTC Sensation tendríamos por ejemplo la citada plataforma
HTC Watch, entendida como un
videoclub online exclusivo de los terminales de la firma finlandesa. En el
Nokia Lumia 800, además de los mencionados
Nokia Music y
Nokia Mix, destaca por encima de todo
Nokia Drive.
Nokia Drive es el servicio de geonavegación paso a paso, heredero del
Ovi Mapas que conocimos en los
móviles Symbian (y que hoy ha pasado a llamarse
Nokia Mapas). Es un sistema que, en la práctica, convierte el teléfono en un
GPS gratuito,
sin la necesidad de usar la conexión de datos del terminal para tener
acceso a los mapas, ya que podríamos descargarlos mientras estemos
conectados a una red
Wi-Fi para usarlos luegos en modo local. Cierto que la función
Nokia Mapas está disponible en otros móviles con Windows Phone 7.5, no así la citada
Nokia Drive, que es exclusiva de los teléfonos fabricados por la
finlandesa.
Cámara
Similitudes y diferencias en este apartado. Ambos terminales apuestan por una
cámara de ocho megapíxeles en modo fotográfico. Pero ni hablamos del mismo tipo de sensor, ni ofrecen las mismas funciones en modo vídeo. Para empezar,
el Nokia Lumia 800 opta por una lente Carl Zeiss, que ya le valió multitud de elogios en el
Nokia N8 (aunque en aquel caso, desarrollaba una
resolución máxima de hasta doce megapíxeles).
Los resultados de la captura son muy luminosos y nítidos, y aunque la comparativa con las fotos que toma la cámara del
HTC Sensation pueden estar sujetas a matices que pasar por lo subjetivo, la balanza en nuestro caso se decanta a favor del
Nokia Lumia 800. Sin embargo, en el caso del teléfono de
HTC, tiene a su favor la posibilidad de registrar
muy buenos vídeos en calidad FullHD 1080p, frente a las secuencias a
720p que atrapa el Lumia 800.
Autonomía
En este punto, y atendiendo a los
índices oficiales aportados por los respectivos fabricantes (y que están
muy próximos a la experiencia de uso real), la balanza sigue del lado del
móvil de
Nokia. A su favor, una
duración en uso de entre casi diez y trece horas, en función de si activamos o no el sistema de acceso a redes
3G, frente a las casi
siete y ocho horas que nos va a durar el HTC Sensation en las mismas condiciones. Por otro lado,
en reposo, el
Nokia Lumia 800 aguanta entre 265 y 335 horas, mientras que
el terminal de HTC soporta más tiempo: entre 350 y 400 horas.
Conclusiones
Es difícil decantarse por uno de estos dos dispositivos. Mientras que el
Nokia Lumia 800 se define por ser un
móvil muy bien equilibrado en construcción, prestaciones y, sobre todo,
que busca una perfecta integración de técnica y funcionamiento, el
HTC Sensation opta por sumarse a la carrera de terminales que presumen de contar con lo último de lo último en componentes, primando la potencia sobre la adecuación de sus entrañas a las necesidades reales del sistema.
Por otro lado,
el diseño también podría marcar la diferencia. Ambos son
dispositivos muy sólidos y resistentes, aunque el
Nokia Lumia 800 no hipoteca su faceta más estética como sí podría entenderse en el HTC Sensation. Y es que, ciertamente,
los responsables del diseño del Nokia Lumia 800 han hecho un gran trabajo, cincelando el chasis de este teléfono para
incrustarlo en una estructura de un solo bloque que, además, resulta enormemente
atractivo.
El
sistema es otro de los puntos a destacar a la hora de elegir uno de los dos.
Los esfuerzos de Microsoft por crear un entorno cómodo y fluido, así como la
aportación de Nokia con aplicaciones definitivamente diferenciadoras es de elogiar. No obstante, la posibilidad de
disponer
de un Android perfectamente integrado con los servicios de Google en el
HTC Sensation puede seguir siendo todo un argumento difícil de rebatir entre una buena parte de los usuarios de teléfonos inteligentes.
Es en el apartado
multimedia donde el
Nokia Lumia 800 saca pecho y
olvida posibles complejos pasados por parte de la firma de Espoo. Aunque
no grabe vídeo en formato FullHD ni cuente con el amplio abanico de compatibilidad de formatos del HTC Sensation, el terminal de la
finlandesa equilibra
toda una oferta de servicios que se adhieren perfectamente al sistema, ya sea con el r
eproductor
nativo de la plataforma (Zune), con su portal y red social de
videojuegos (Xbox Live) o con su sistema de música streaming (Nokia
Music y Nokia Mix).